Hoy, leyendo el diario El País en Internet he encontrado un artículo que me ha parecido digno de comentarse aqui. Los autores de un comic basado en el «Informe sobre el 11-S» han publicado otro tebeo en el que se relata la «guerra contra el terrorismo» de Estados Unidos con visión crítica. ¿Por qué me ha parecido curioso?
Principalmente por dos cosas. Ambas tienen que ver con mi forma de ver el mundo, de pensar la historia, de entender el aprendizaje. Siempre he considerado que hay cosas que todos los adolescentes deben saber. Normalmente este sector de la población tiende a ver el mundo con los ojos de determinados medios de comunicación y determinadas empresas mediáticas. Están acostumbrados a un cine, música, series, juegos, que sólo muestra una parte de la historia, una parte del mundo. Siempre, incluso cuando era adolescente, creí que es necesario que los futuros dirigentes del mundo intenten comprender que ocurre aquí y allá, el porqué de las cosas, el cómo, el cuando. Imprescindible conocer que el mundo está lleno de colores, que nada es blanco ni negro, sobre todo a esa edad. Por eso, estas iniciativas me parecen brillantes. Los jóvenes debemos saber que ocurre. Necesitamos saber que fue el 11 de Septiembre, por qué se produjo, qué es la guerra al terrorismo, que es Guantánamo, y tantas otras cosas que ocurren en todas las esferas de este mundo.
Creo que este comic y otras formas de conocer otras realidades son de obligado conocimiento. Todos los institutos o universidades del mundo deberían imponerlo como lectura obligatoria en Historia, también documentales, películas, o cualquier otro material que nos exponga otras formas de comprender el mundo, cuestiones críticas con la realidad, pero siempre dejando claro que es parte de la verdad, no la verdad. Que los adolescentes empiecen a recibir muchas visiones de un mismo acontecimiento, para que se vuelvan críticos, para que quieran informarse, para que les pique la curiosidad.
Pero, no sólo me ha interesado esta noticia por mi empeño de que el mundo sepa que nada tiene una única causa, sino que cada acontecimiento lleva enmarañado una gran cantidad de razones, motivaciones y consecuencias. Otra de mis razones para reseñar tal tebeo crítico es que desde hace años creo y defiendo que hay que hacer la historia interesante a la población, para hacer la historia algo vivo, algo presente en nuestras vidas, para aprender de ella y evitar que se repita.
Amo la historia, sobre todo la contemporánea, la que está detrás de todo lo que vivo, de las cosas que leo y veo. Hace años tuve un profesor que me hizo amarla mucho más. Un profesor que me hizo ver como la historia es el presente no el pasado, que todo acontecimiento tiene causas, consecuencias, afectados. Este profesor tenía una forma particular de enseñarla. Nos hacía vivirla. Cada tema de historia universal contemporánea era analizado a través de películas, artículos de revistas y periódicos, música. Viví la Primera Guerra Mundial a través de Senderos de Gloria, la Revolución Rusa a través del Acorazado Potemkin, la Segunda con La lista de Schindler, el mayo del 68 a través Bob Dylan y «Papá cuentame otra vez…» de Ismael Serrano. Nunca olvidaré lo que aprendí, ni tampoco a ese profesor.
Este tebeo me ha refrescado esto. La historia hay que hacerla asequible a todos. Hay que acercarla a los jóvenes ya que son ellos los que tienen que hacerla, reconstruirla, aprender de los errores del pasado y ser críticos. Es fundamental que la educación tenga en cuenta esto y el profesorado ha de salir del discurso aprendido para atraer, para que la historia pueda apasionar, aunque eso les cueste más trabajo.
Este tebeo sobre el 11-M y la guerra contra el Terrorismo tiene alrededor de 150 páginas y está muy trabajado. Es una labor encomiable, digna de ser leída en todo el mundo. Porque no estoy defiendo la vulgarización de la historia, si no que los medios alternativos de darla a conocer estén trabajados, contrastados, que sean útiles y enseñen.
Lo que se ve nunca se olvida: una imagen vale más que mil palabras. Es importante que conozcamos la historia, toda, la que nos cuentan unos y otros, pero esto conlleva un esfuerzo. Un esfuerzo que merece la pena. Si somos capaces de ver más de una verdad, seremos capaces de respetar, poner en marcha y defender que el mundo está compuesto de muchas verdades y que la única forma de avanzar es a través de la solidaridad, la tolerancia y el respeto mutuo.
La historia no es un libro, es una película, una canción, un artículo, una novela y, por supuesto, un comic. Vivamos las historias, todas, otras, las diferentes, las críticas. Aboguemos por otra historia
Cuando de Guerra se trata sin duda vale la pena revisar el compendio de la historia en la Biblioteca de Voces del Siglo XX. por la Fundación Internacional José Guillermo Carrillo saludos, les invito a revisar: http://www.fundacionjoseguillermocarrillo.com/sitio/inicio.php
Interesantes los personajes que se integran.
Una buena recomendación.
Que buen artículo, encontre este contenido ya que fue plublicado en la página http://www.docencia.es
Les felicito sigan asi.
Es muy cierto que los adolescentes deben de conocer la historia ya que no es pasado sino tambien el diseño del presente.
El que te hayan hecho amar la historia, es una gran ventaja; con películas, musica, documentales, comic, etc.
Que buen espacio, bye…
Hola, estoy realizando una investigación sobre la situación actual de México, es complemento a un tema sobre la enseñanza de la historia, y en particular lo que acabo de leer me fascino, felicidades, es una lugar muy interesante.
Saludos.
MAHR
El lograr que un alumno entienda y disfrute una asignatura, habla de las habilidades del profesor. Lo importante entre los docentes sería que dejaran de vislumbraran a la historia como la acumulación de fechas que ni siquiera se contextualizan ni se ubican en un espacio y tiempo. Bien por las propuestas.
Muy interesante el como se trata la historia.